Más vale la salsa que los caracoles
Se emplea cuando lo principal tiene menos valor que lo accesorio.
(refrain) m. Dicho agudo y sentencioso de uso común.
Se emplea cuando lo principal tiene menos valor que lo accesorio.
Del mismo modo que se considera necesario el pan, resulta imprescindible que una colectividad esté dirigida por alguien. En general, recomienda no prescindir de lo principal.
Advierte que el tocino da buen sabor a un cocido, del mismo modo que un buen predicador debe valerse de la doctrina de San Agustín, si quiere hablar con fundamento teológico. Se emplea para explicar que algo no es perfecto porque falta lo esencial o para criticar a quien siempre habla de lo mismo. Se puede utilizar también con un sentido irónico, para motejar a quien siempre habla de lo mismo.
En ocasionees, para lograr algo importante, se debe estar dispuesto a gastar una cantidad no muy grande.
Da a entender que lo que carece de lo necesario no aprovecha o que resulta necesaria la presencia de todas las cualidades para llegar a la perfección.