A la luz de la vela, no hay mujer fea
Con luz escasa no se aprecian las faltas, en este caso de quien no es agraciado físicamente.
(refrain) m. Dicho agudo y sentencioso de uso común.
Con luz escasa no se aprecian las faltas, en este caso de quien no es agraciado físicamente.
Se emplea para rechazar un abuso o un ofrecimiento engañoso o impertinente. Quien lo dice da a entender que no acepta pasar por tonto.
Uno puede burlarse de alguien, pero no de su riqueza. Simula un comentario para sí mismo en el que da a entender que no se le engaña fácilmente en cuestiones económicas.
Resulta más fácil el engaño si se lleva a cabo con luz escasa.
Hay quien pensando engañar a otro resulta engañado él mismo.