El bien no es conocido hasta que es perdido
Enseña que sólo apreciamos algo que poseemos, en especial la buena suerte o las posesiones, cuando falta o se aleja de nuestro lado.
Tipo: Refrán
Uso: Poco usado
Observaciones: Otro refrán sigue este mismo esquema: La salud no es conocida hasta que es perdida.