El buey suelto bien se lame
Así como el buey alcanza a lamerse por todas partes al no estar atado al yugo, quien no sirve a nadie hace su voluntad sin tener que depender de los demás. La paremia, por tanto, señala lo apreciable de la libertad. También se aplica esta paremia a la persona que, por estar soltera, no tiene las ataduras del matrimonio.